La primera parte es la adquisición en subasta de una casa, en la que ya tenemos acuerdo de venta con la persona que quiere comprar, así que esta parte sólo queda esperar a que solucione los trámites varios para adquirir el inmueble.
La rentabilidad que le vamos a sacar a este proyecto es del 10% anual, que está un poco por debajo de las que venimos consiguiendo, pero aquí lo que destaca es la seguridad de la operación, porque ya la tenemos cerrada con el comprador. Te lo explico:
Él quiere esa casa sí o sí, porque la conoce perfectamente y justo al lado vive su familia, pero no podía pujar en subasta, porque para eso tienes que tener el dinero contante y sonante, y él necesita hipotecar.. El tiempo que tardemos en adjudicarnos la casa, e inscribirla en registro después de liquidar impuestos, más el tiempo que tarde su banco en tramitar la hipoteca, será el que necesitemos para cerrar esta parte del proyecto.
Aquí la rentabilidad es algo menor a lo que estás acostumbrado, pero la seguridad es total.
La segunda parte de la operación es la adquisición de un piso en el barrio Infante Juan Manuel de Murcia, zona con mucha demanda y además en un edificio en el que se están realizando mejoras importantes en la fachada, dentro de una comunidad donde hay piscina y pista de tenis, casi nada.. Ya tenemos un acuerdo cerrado con las personas que están viviendo en la casa, así que en cuanto esté preparado va a volar.
Aquí la rentabilidad es mayor, estimamos que en torno a un 20% anual, y los tiempos van a ser similares a los de la primera parte del proyecto. Si analizamos la rentabilidad conjunta de la operación, vas a comprobar que sigue estando muy por encima de lo que tienes con otros productos de inversión, en torno al 15% anual
Si no me crees, aquí tienes los escenarios: